Espectral (2016): Enemigo sin forma, guerra sin ley
Spectral es una película de acción y ciencia ficción de Netflix ambientada en una zona de guerra no especificada de Europa del Este, donde el ejército de EE. UU. se enfrenta a un enemigo misterioso: no es un humano, ni un robot, ni un extraterrestre, sino… algo casi invisible e imposible de matar.
La película comienza con la atmósfera de un thriller militar mezclado con elementos de guerra modernos, pero cuanto más profundiza el público, más se siente atraído hacia una confrontación sobrenatural, donde la tecnología, la ciencia y el coraje se llevan hasta el límite máximo.
Reflejos:
Efectos visuales de alta calidad: aunque el presupuesto no es tan grande como el de una película superproducción de Hollywood, Spectral impresiona con efectos CGI fluidos, diseños de enemigos "espectrales" (¿fantasmas tecnológicos?) únicos y escenas de lucha llamativas.
Idea interesante: La película tiene el espíritu de Black Hawk Down mezclado con Aliens: un grupo de soldados equipados con tecnología avanzada pero completamente desorientados contra un enemigo que está más allá de la lógica común. A partir de aquí, el elemento de ciencia ficción fue apareciendo poco a poco, aportando un color diferente al bosque de películas de acción.
Ritmo rápido, tensión constante: nada de prolijidad ni romantismo. Spectral se centra completamente en la misión de supervivencia, comprender y destruir la amenaza. Los ataques relámpago, los espacios en ruinas y la sensación de estar “cazado” mantienen la película en un buen ritmo.
En breve:
Spectral es una joya escondida en la biblioteca de ciencia ficción militar de Netflix. Con su ritmo rápido, sus bellas imágenes, sus ideas únicas y su atmósfera tensa, la película merece una calificación más alta. Para aquellos que aman el género “militar vs sobrenatural” pero que aún tienen elementos científicos claros.
Una frase lo resume:
Cuando la tecnología no logra salvarte, debes averiguar qué te está matando y por qué.