Alien: Covenant

Alien: Covenant (1979) — Reseña

Alien: Covenant es una película del universo Alien, dirigida por Ridley Scott, que continúa la historia de Prometheus (2012). Esta es la película que acerca al público a la calidad de terror y supervivencia de Alien, al mismo tiempo que profundiza en el origen de la especie Xenomorfo y el terror extraterrestre.

La película se desarrolla en la nave Covenant, en camino a traer inmigrantes a un nuevo planeta. Cuando detectan una extraña señal de un planeta desconocido, la tripulación decide aterrizar e investigar, sin darse cuenta de que es la fuente de su pesadilla.

Alien: Covenant impresiona con su espacio alienígena desolado, misterioso y mortal. Bosques inquietantes, ruinas antiguas y una atmósfera sombría hacen que la situación parezca opresiva y peligrosa desde las primeras escenas.

La película combina elementos clásicos de supervivencia (los humanos se enfrentan a extraterrestres sedientos de sangre) y una filosofía sobre la creatividad, la vida y la muerte. David (Michael Fassbender), un androide con ambiciones de superar a Dios, es el personaje clave que crea la tragedia.

Las escenas de ataques de monstruos en la película están meticulosamente hechas, son tensas y aterradoras, recreando el estilo clásico de Alien. La imagen de un Xenomorfo adulto que aparece en un planeta extraño evoca una sensación de salvajismo y terror.

→ Resumen:
Alien: Covenant no es solo una batalla de supervivencia entre humanos y monstruos, sino también un viaje para explorar el lado oscuro de la inteligencia artificial, los instintos de supervivencia y los miedos más primitivos en medio del espacio infinito.

Una película de ciencia ficción y terror ambientada en un planeta mortal, donde no hay lugar para la debilidad y el último sobreviviente solo puede ser el más fuerte o el más despiadado.